SAN JUAN- La representante Lourdes Ramos, una católica devota, recibió con profundo pesar la triste nueva del deceso del Papa Francisco, lamentando que su voz de paz y concordia, ya no esté presente en un mundo convulsionado por conflictos, violencia y desunión familiar.
“Esa luz de inspiración y de despejar sombras de inseguridad, se fue apagando lentamente como si quisiera prepararnos para que su partida fuera menos dolorosa. El Señor le cumplió la promesa de vida eterna justo al final de la Semana Santa”, expresó entre lágrimas.
Precisamente, según Ramos, esta fue una de las mayores recompensas que recibió el Pontífice, permitirle estar presente en Domingo de Pascua para su bendición Urbi et Orbi, y despedirse como guía espiritual con un legado trascendental.
Siguió diciendo la legisladora que la afable y campechana personalidad del Papa Francisco, cautivó a todo el mundo, aún a no creyentes, destacando su defensa de los desvalidos, los sectores vulnerables, los marginados y los desplazados de sus países de origen.
“Siempre fue un ejemplo vigoroso de amor y compasión, destacando su pontificado con un mensaje de caridad, solidaridad y justicia. El Papa siempre tuvo presente las necesidades de los humildes y giró la cara de la Iglesia, a cumplir su misión con el prójimo con entusiasta devoción”, afirmó.
Añadió Lourdes Ramos que a pesar de que por sentimiento y tradición hoy sería un día de luto, la partida del Papa Francisco luego de largos días de enfermedad confirma el poder de la oración y la alegría de conocer que la fe mueve montañas.
