San Juan, Puerto Rico – La Cámara de Comercio de Puerto Rico (CCPR) presentó los resultados del Índice de Confianza del Empresario Puertorriqueño 2025, junto a los hallazgos más recientes del Índice de Confianza del Consumidor Puertorriqueño (ICC), realizados por Estudios Técnicos, Inc. y Nielsen Consumer LLC, respectivamente. Ambos estudios coinciden con un clima de cautela económica, marcado por altos costos, percepción de recesión e incertidumbre sobre el futuro económico del País.
El Índice de Confianza del Empresario Puertorriqueño 2025, basado en una muestra de 216 participantes, mostró una disminución en comparación con 2024, reflejó un nivel de confianza moderado y una postura de cautela por parte del sector empresarial ante el panorama económico general. A pesar de que el 60.6% considera que Puerto Rico se encuentra en recesión, el sector empresarial mantiene expectativas moderadamente positivas a corto plazo, ya que el 63% anticipa un aumento en sus ventas durante los próximos seis meses, aunque con limitada intención de expansión y creación de empleo.
Entre los principales retos que afectan la operación de las empresas se destacan el costo energético (45.8%), la carga contributiva (44.4%) y la situación económica general (42.6%), seguidos por la burocracia gubernamental y la escasez de fuerza laboral, particularmente en empresas medianas y grandes.
“Los resultados reflejan las presiones que enfrenta el sector privado, particularmente en términos de costos operacionales. También confirman que el empresario puertorriqueño continúa demostrando resiliencia y voluntad de seguir invirtiendo y generando empleo. Desde la Cámara de Comercio reiteramos la urgencia de que el sector privado, gobierno y legislatura se unan para atender estos retos y crear un ambiente de negocios sostenibles y competitivos”, expresó la Lcda. Margaret Ramírez Báez, presidenta de la CCPR.
El informe señala que el 84.1% de los empresarios opina que los costos de productos y servicios continúan en aumento y que el 36.6% de esos incrementos se atribuyen a los aranceles, los cuales han impactado negativamente a 63.2% de las empresas consultadas. El estudio advierte que la recuperación económica de Puerto Rico es altamente dependiente de fondos federales no recurrentes, mientras que las proyecciones del Producto Nacional Bruto (PNB) anticipan contracciones económicas a partir de 2025, lo que refuerza la necesidad de políticas públicas enfocadas en crecimiento sostenido y desarrollo del sector privado. En términos de transformación empresarial, el 57.4% de las empresas reportó utilizar plataformas de comercio electrónico y cerca de la mitad cuenta con fuentes alternas de energía o agua, como parte de sus estrategias de continuidad operacional.
Índice de Confianza del Consumidor Puertorriqueño
Desde la perspectiva del consumidor, el Índice de Confianza del Consumidor Puertorriqueño, realizado por Nielsen con una muestra de 510 personas, se ubicó en 91 puntos, una disminución de cuatro puntos en comparación con 2024, aunque aún por encima del promedio. El estudio revela un consumidor más prudente y menos optimista, especialmente en relación con la estabilidad económica del futuro.
Según el informe, el 86% de los consumidores considera que Puerto Rico está en recesión, y cerca de cuatro de cada diez anticipan que la situación económica empeorará en los próximos seis meses. Solo el 21% visualiza una mejoría, reflejando una percepción económica más pesimista que en años anteriores.
“La inflación continúa siendo la principal preocupación del consumidor, seguida por la seguridad energética, educación y seguridad general. Como respuesta, el ahorro se ha convertido en un comportamiento estructural. El 79% de los consumidores ha modificado sus hábitos de gasto, principalmente reduciendo el presupuesto para entretenimiento, servicios del hogar y compra mensual de alimentos”, indicó Tatiana Irizarry Hilera, líder de Ventas de Consumer & Marketing Insights.
A pesar del ajuste en el consumo, el gasto promedio mensual en alimentos y productos del hogar alcanzó su nivel más alto desde 2019, con un promedio de $632 mensuales, concentrándose mayormente en supermercados de cadena. El 72% compra al menos una vez por mes en plataformas digitales, pero no se observa un crecimiento vs 2024, mientras que la compra física disminuye levemente su frecuencia, pero sigue siendo dominante.
Ambos índices coinciden en que, tanto empresarios como consumidores, experimentan un entorno de alta incertidumbre económica por la inflación, percepción de recesión y poca confianza en el panorama económico. No obstante, también reflejan capacidad de adaptación y ajustes estratégicos.
