(Sábado, 13 de diciembre de 2025; Naranjito, Puerto Rico) Más de 6,000 familias de Naranjito contarán con un sistema de agua más confiable gracias a la construcción de una nueva toma de aguas crudas, cuyos trabajos iniciaron ayer con colocación de la primera piedra del proyecto.
La actividad fue encabezada por la gobernadora Jenniffer González Colón, junto al presidente ejecutivo de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), Ing. Luis Reinaldo González Delgado, el alcalde Orlando Ortiz, el representante Axel “Chino” Roque y los senadores Rafael “Rafy” Santos y Wilmer Reyes.
El proyecto, que cuenta con una inversión de $15.5 millones, será financiado mediante una combinación de fondos de la American Rescue Plan Act (ARPA), donde la gobernadora aseguró partidas para la isla mientras fue comisionada residente, y de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados, forma parte de los esfuerzos del Gobierno de Puerto Rico para modernizar la infraestructura esencial de la Isla.
Con esta iniciativa, la Autoridad busca fortalecer el sistema de abastecimiento de agua potable del municipio mediante el establecimiento de una nueva planta de filtración en Naranjito, lo que permitirá aumentar la confiabilidad y continuidad del servicio para 6,733 familias que dependen del sistema de Naranjito. Esta obra forma parte de las iniciativas que impulsa la AAA para asegurar un suministro de agua potable confiable, resiliente y sostenible.
“Nuestro compromiso es con resolverle a la gente y este proyecto es parte de la inversión total de $151 millones que estamos haciendo en Naranjito solamente en proyectos relacionados al agua. Una vez más estamos poniendo los fondos federales que aseguramos como comisionada residente a correr, en obras que le mejoren la calidad de vida a nuestro pueblo”, expresó la gobernadora.
El alcance del proyecto contempla la construcción de una nueva toma de aguas crudas, una estación de bombeo, la instalación de una línea de tubería que conectará la captación con la Planta de Filtración de Naranjito, así como mejoras a la infraestructura de acceso existente, reforzando la estabilidad y continuidad del servicio de agua potable para las comunidades beneficiadas.
“La colocación de esta primera piedra representa un paso concreto hacia la transformación de nuestro sistema de agua potable. Este proyecto fortalece la resiliencia de la infraestructura, garantiza un servicio más confiable para miles de familias y reafirma nuestro compromiso con mejorar la calidad de vida de las comunidades”, expresó el presidente ejecutivo.
Por su parte, la gobernadora Jenniffer González Colón destacó que este tipo de proyectos reflejan la prioridad de su administración de acelerar iniciativas de infraestructura crítica, esenciales para el desarrollo económico y social de Puerto Rico, y subrayó la importancia de poner en marcha obras que por años fueron postergadas.
Además del impacto directo en el servicio de agua potable, la construcción de esta nueva toma de aguas crudas generará aproximadamente 151 empleos directos e indirectos, contribuyendo al desarrollo económico local. Actualmente, el proyecto se encuentra en labores de preparación del terreno, mejoras al camino de acceso, entre otras gestiones previas al inicio de la construcción.

