El juez federal Pedro Delgado impuso una orden de mordaza a todas las partes involucradas en el caso de la muerte de Keishla Marlen Rodríguez Ortiz, donde fueron Félix Verdejo y Luis Antonio Cádiz Martínez.
Esta orden se extiende a los abogados, fiscales, personal que labora en el tribunal federal y cualquier persona concernida para que no divulguen información a los medios de comunicación, así como en las redes sociales.
Además, se ordenó una evaluación de situación económica a Verdejo Sánchez para evaluar si puede costear representación legal.