En el marco de la celebración de su 15to Aniversario, la compañía de teatro Y no había luz comparte los momentos más importantes de su trayectoria y presenta el estreno de su más reciente cortometraje, a través de sus redes sociales del 1ro hasta el 15 de diciembre de 2020. Invita a la audiencia a rememorar la diversidad de proyectos de la pasada década y media del colectivo y apuesta a reinventarse con una tienda en línea para abrirse paso al mercado del arte internacional. Reconociendo lo difícil que es celebrar en medio de una Pandemia, el colectivo decidió no perder la oportunidad de festejar sus logros artísticos y su continua labor cultural por los pasados 15 años.
«Como no es posible encontrarnos en un evento presencial y compartir con nuestras amistades como se debe, decidimos conceptualizar una «fiesta» de 15 días desde nuestras redes sociales. La idea es compartir fotos y vídeos de 15 momentos memorables de nuestra trayectoria en 15 días y que nuestros seguidores puedan compartir con sus comentarios, si vieron la obra o recuerdan alguna anécdota de ver nuestro trabajo. Con sus comentarios e interacciones en las publicaciones, las personas estarán participando para adquirir obsequios especiales de nuestros nuevos productos educativos», explicó Yussef Soto Villarini, co-director artístico del colectivo.
La compañía de teatro destaca que la clave de poder continuar su trabajo por 15 años ha sido la capacidad de adaptarse a las necesidades de los tiempos. Además de revisitar sus logros y trayectoria, la compañía destaca la transformación que han vivido como grupo de teatro y cómo han podido diversificar su oferta cultural a través de los tiempos. En esta ocasión, culminan su celebración con el estreno de un nuevo cortometraje, protagonizado por uno de los personajes de su libro Centinela de Mangó. El mismo nos invita a pensar en las cosas esenciales de la vida y en cómo mantenernos conectados con ellas a pesar del distanciamiento actual. Esta pieza fílmica es el cierre del aniversario y se presentará el 15 de diciembre por la cuenta facebook live de Y no había luz, a las 8pm.
«El mundo en general atraviesa una crisis social y ambiental alarmante. Por eso es que en cierta medida este evento es un buen pretexto para reflexionar sobre la inevitable transformación a la cual nos hemos enfrentado con nuestras propuestas artísticas. Entendemos «celebrar» como un acto de agradecimiento a nuestras familias, a nuestras maestras, maestros y sobre todo a nuestra audiencia, que nos ha apoyado desde los inicios de este proyecto de vida», adelantó Soto Villarini.
Por otra parte, en esa constante búsqueda de diversificar su arte, la compañía cuenta con una nueva línea de diseños y mercancía inspirada en su más reciente libro «Centinela de Mangó». «Esperamos para antes de culminar el año contar con una tienda en línea, donde podrán adquirir nuestros productos educativos, como nuestros libros, Centinela de Mangó en español y en inglés, el Manual de Medias Máscaras y Títeres y demás mercancía como camisas, carteras, gorras, parches y pegatinas holográficas, todas con diseños originales de Y no había luz», asegura Julio Morales, co-director artístico, ilustrador y diseñador de los productos.
La tienda en línea es una oportunidad de continuar en contacto con su audiencia ya que es otra alternativa de apoyar al grupo con la compra de sus productos. «Nuestra propuesta es multidisciplinaria y la intención de poder llegar de otra manera a un mercado internacional nos permite seguir aportando al mundo con nuestro arte. Nos estimula mucho la aceptación que hemos recibido con los talleres virtuales y lo que se ha logrado con el Club Centinela. La respuesta positiva de las familias con la experiencia que vivieron en los encuentros virtuales nos ha inspirado para crear nuevos productos que complementan nuestro componente educativo.», aclaró Morales sobre la continuidad de la programación educativa de la compañía. Cabe señalar que el grupo se ha mantenido trabajando de manera remota con talleres virtuales con comunidades, escuelas, y familias de Puerto Rico, República Dominicana, Honduras, Ecuador, México, Chile y las ciudades de Boston, Chicago y Nueva York. Todos estos talleres contaron con becas para los participantes, gracias en parte al apoyo del Fondo Flamboyán para las Artes, la Fundación Banco Popular de Puerto Rico, Hispanic Federation, Loisaida Inc. y Acacia Network.