El alcalde de Juncos, Alfredo “Papo” Alejandro Carrión, favoreció el viernes, la nueva orden ejecutiva anunciada por la gobernadora Wanda Vázquez Garced, ante el aumento en casos de COVID-19 en la isla.
“Algo había que hacer, por la cantidad de personas que mueren día a día, tenemos que buscar una solución. Tenemos que llegar a la gente, los ciudadanos y decirle que son importantes para nosotros y se tienen que cuidar… No queremos una muerte más, como decía la señora gobernadora (Wanda Vázquez)”, expresó el alcalde junqueño sobre la orden que estará vigente desde el lunes, 7 de diciembre hasta el 7 de enero de 2021, establece modificaciones en el toque de queda, además de “lockdown” los domingos y Ley Seca los sábados y domingos .
Papo Alejandro, favoreció que se imponga la Ley Seca los fines de semana al comentar que a su juicio “los domingos es el día más peligroso” con la aglomeración de ciudadanos en los negocios.
“Yo paso por diferentes carreteras, de Yabucoa, Arroyo, de Juncos a Gurabo, de todos los sectores, a Naguabo y parece que la gente no sabe que estamos en una pandemia. El abuso que hay en los negocios y la mayoría son los domingos. Esperamos que, cerrando el domingo, cojamos conciencia y lo que hacíamos el domingo no lo hagan el sábado o el lunes”, añadió a la vez que dijo, esperar que los ciudadanos tomen conciencia sobre lo peligroso que es el virus.
En ese sentido, urgió a los junqueños a evitar el contacto con otras personas, y a no asistir a lugares donde haya aglomeraciones.
De otra parte, dijo que aunque no cuentan con suficientes efectivos de la Policía estatal, estarán apoyándolos con la Policía municipal, fiscalizado los comercios en el cumplimiento de la orden ejecutiva
“Ella (la gobernadora) fue clara en que los municipios fuéramos parte. Ella sabe que tenemos la Policía de Puerto Rico en los municipios es bien escasa, que son los Policías municipales que están día a día trabajando, y que vamos a cumplimentar para hacer lo que tenemos que hacer”, subrayó al reaccionar al llamado de la gobernadora a los alcaldes para que fiscalicen el cumplimiento de la orden ejecutiva.
Entre las nuevas disposiciones, se informó que el toque de queda en Puerto Rico será de 9:00 p.m. a 5:00 a.m. de lunes a sábado. Los domingos, todo ciudadano deberá permanecer en su lugar de residencia o alojamiento durante las 24 horas del día, salvo para acudir a los comercios y servicios autorizados por la orden.
La nueva orden prohíbe el consumo, venta o expendio de bebidas alcohólicas desde las 5:00 a.m. del sábado hasta las 5:00 a.m. del lunes. Los comercios autorizados podrán operar hasta las 8:30 p.m. de lunes a sábado. Los domingos sólo permanecerán abiertas gasolineras, farmacias, supermercados, ferreterías, restaurantes sólo mediante “delivery” o “carry-out”. Se permitirá el sistema de entrega o “delivery” para supermercados y restaurantes de lunes a domingo hasta las 11:00 p.m.
Los domingos continuarán ofreciéndose los servicios religiosos, con las mismas restricciones y capacidad de 30%.
Se mantiene el máximo de ocupación en todos los comercios autorizados del 30%. Las áreas comunes permanecerán cerradas, excepto las piscinas de los hoteles, que se permiten a un 30% de capacidad, bajo supervisión de personal del hotel. Los gimnasios de complejos de vivienda podrán permanecer abiertos, siempre y cuando haya personal supervisando.
Se reinstala la prohibición de las visitas a los complejos correccionales y se mantiene la prohibición de visitas en los centros de cuido de envejecientes. Los centros de cuido de niños podrán seguir operando con las mismas restricciones vigentes.
Continúan cerradas las discotecas, barras y cafetines. Los casinos, cines y gimnasios podrán seguir operando como al presente, con capacidad máxima de 30%.
Los alcaldes podrán reforzar sus planes de fiscalización en sus jurisdicciones para procurar el cumplimiento con esta orden ejecutiva. Para esto, podrán establecer cualesquiera acuerdos colaborativos con las agencias concernientes a los fines de ajustar dichos planes de vigilancia, conforme al nivel de contagios en sus municipios. Serán responsables de tomar las medidas necesarias para asegurar el fiel cumplimiento con las medidas cautelares establecidas en esta orden, entiéndase distanciamiento físico en los comercios autorizados y el uso obligatorio de mascarilla.
Los gobiernos municipales tendrán la discreción para establecer cualesquiera acuerdos colaborativos con las agencias concernidas para fiscalizar aquellos comercios que hayan solicitado algún cambio en el permiso de uso previo a la vigencia de esta orden ejecutiva.
Por otro lado, los patronos no pueden exigir una prueba PCR a los empleados para regresar a los trabajos..
El Departamento de Hacienda vigilará electrónicamente a las megatiendas que violen las directrices de vender más allá de medicinas y alimentos los domingos. El sistema SURI ayudará con ese monitoreo, y las megatiendas que vendan algo más de lo permitido los domingo será cerrada.
Además, se ordena a todos los negocios tener carteles con la línea confidencial, 787-522-6300 para denunciar cualquier incumplimiento de la Orden Ejecutiva.
