La madrugada del Viernes Santo, mientras la mayoría de los puertorriqueños aún dormían, mi policía, el sargento Eliezer Ramos Vélez, luego de cumplir su jornada laboral, presenció cómo unos individuos disparaban a mansalva en el expreso Román Baldorioty de Castro en Carolina.
A pesar de encontrarse solo y en su vehículo personal, su pasión y compromiso con protegernos, lo condujo a dar seguimiento e intervenir con estos, aún conociendo el peligro al que se enfrentaba.
Eliezer, fue más allá de su deber, hizo su trabajo con valentía y determinación. Su entrega le costó lo más preciado que tenemos, LA VIDA.
No existen palabras que puedan aliviar el dolor de su familia, amigos y compañeros ante lo ocurrido con nuestro hermano de “sangre azul”. Esta pérdida es irreparable, pero demuestra y reafirma el compromiso de todos y cada uno de mis policías con Puerto Rico.
Hoy, podemos afirmar que la muerte de Eliezer no fue en vano ni quedó impune. El trabajo que él inició esa madrugada en la que le arrebataron la vida de manera cruel, fue completado hoy, con el arresto de sobre 50 individuos que integran una organización de narcotraficantes que cometían crímenes violentos y que necesitaban ser sacados de las calles, como Eliezer intentó hacerlo.
Desde ese día, no escatimé en tiempo ni recursos para identificar y recopilar la evidencia para encausar a estos cobardes que cegaron la vida de un excelente servidor público en plena función de sus deberes. Los arrestos de hoy representan el resultado de la unión de fuerzas entre la Policía de Puerto Rico, el FBI y la Fiscalía Federal, para beneficio de todos los puertorriqueños. Pero, también demuestra que cuando se atenta contra cualquier agente de Ley y orden, sea estatal o federal, los responsables nos verán llegar juntos a sus casas.
Para nuestra sorpresa y profunda decepción, de la investigación surge que un agente fue vinculado a esta organización. Esto representa una alta traición a los principios que juramenta un policía y al uniforme que con orgullo y gallardía defendemos todos. Por sus actos, ahora, le tocará vestir otro uniforme, el de confinado.
Pero, por este agente que claudicó a sus valores, hay otros miles de policías honrados y comprometidos, que, como Eliezer, salen a diario dispuestos a arriesgar sus vidas para salvar las de otros. Gracias a ellos, hoy logramos ponerle fin a este grupo de individuos que se dedican a arrebatarle la paz a nuestra gente.
Agradezco a todo el equipo que colaboró en esta misión:
HOMICIDIOS CAROLINA
1.Insp. Mabel Oliveras Colón
2.Tte. José C. Padín Fernández
3.Sgto. Vanlee Perdomo Santana
4.Agte. Yaduil Torres Alemán
5.Edgar M. Ribot Ruiz
DEPARTAMENTO DE JUSTICIA
1.Domingo Emanuelli
2.Jéssica Correa
3.Iris Martínez Juarbe
POLICIA MUNICIPAL DE CAROLINA
4.Insp. Rubén Moyeno Cintrón y su personal
DIVISIÓN DE INTELIGENCIA Y ARRESTOS DE LA POLICÍA
5.Insp. José Fontánez Feliciano y todo su personal de Inteligencia y Arrestos de la Policía
CRIMENES MAYORES
6.Sgto. Karina Ojeda y todo el equipo de Crímenes Mayores de la Policía
GOB. FEDERAL
1.Joseph González – FBI
2.Guillermo González – FBI
3.Stephen Muldrow – Fiscal de Distrito Federal
4.Cap. José Rosa – Task Force FBI (Coordinador)
5.Alberto López Rocafort – Fiscal Federal
6.Sharon Vázquez- Agente Especial FBI
A la familia de Eliezer, les digo: Logramos cumplir el compromiso que hicimos de llevar ante la justicia a quienes le quitaron la vida a Eliezer, por él, por ustedes y por Puerto Rico. Y a ti, sargento Eliezer Ramos Vélez, HOY, TU MISIÓN HA SIDO CUMPLIDA”.