Proyecto Gabriel presenta la tercera edición de Punto y Coma para un violín
Un tributo a la amistad inspira la tercera edición del concierto Punto y Coma para un violín, que se presentará el 15 de diciembre a beneficio de estudiantes del Conservatorio de Música de Puerto Rico.
Por tercer año, la iniciativa Proyecto Gabriel realizará el recital libre de costo, con cuyos donativos podrá continuar ofreciendo almuerzos semanales a cerca de 40 estudiantes del Conservatorio que experimentan limitaciones económicas.
Lo que comenzó hace tres años como un homenaje al fallecido joven violinista Gabriel Baeza Fernández (1996-2016), se transformó en un proyecto para apoyar a estos estudiantes con alimentos y acompañamiento emocional, explicó su madre Loida Fernández, quien lidera la iniciativa.
El recital, que se llevará a cabo en The Union Church of San Juan, será protagonizado por el violinista e integrante de la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico, Fermín Andrés Segarra Cordero, amigo y compañero de estudios de Gabriel durante su infancia y juventud. “Agradezco esta oportunidad de tocar el violín de mi admirado amigo. Me honra colaborar con este esfuerzo que tiene un gran significado para su familia y que busca aliviar la carga por la que llevan algunos jóvenes músicos en su camino a convertirse en profesionales”, expresó Segarra Cordero. El concierto también tendrá como invitados especiales a su profesor y compañero de la Sinfónica, el maestro Francisco Cabán y la pianista Magdalena Nogueras.
Los donativos se destinarán para comprar los alimentos que se utilizan en la preparación de los almuerzos. En el 2022, Fernández comenzó preparando almuerzos para servirlos una vez por semana a unos diez jóvenes que llegaban hasta la Casa Aboy, frente al Conservatorio. Tres años más tarde, la necesidad creció y el número de participantes del Proyecto Gabriel se multiplicó, por lo que, para la preparación de los almuerzos, Fernández recibe la ayuda de Iglesia Metodista San Pablo y su programa “La Mesa Extendida de Jesús”. Actualmente, sirven cerca de 600 almuerzos al semestre.
“Los estudiantes llegan todos los martes a almorzar, a ser escuchados y a escuchar unas palabras de aliento; a ser abrazados, como si abrazara a Gabriel”, expresó la madre.
En cada concierto, el artista invitado vuelve a tocar el violín de Gabriel, de ahí el nombre de Punto y Coma para un violín. Hace unos años, el punto y coma (;) se convirtió en símbolo de quienes han encontrado una nueva oportunidad de vivir luego de experimentar profundas depresiones, atentar contra sus vidas o sufrir porque un familiar se quitó la vida.
El evento es una colaboración de Ágora Cultural Architects, Colectivo Praxis y The Union Church of San Juan. Los interesados en asistir pueden registrarse en https://boletos.boritix.com/tickets/en/punto-y-coma. También pueden donar por ATH Móvil al 787-642-0442, entregar alimentos no perecederos a la Oficina del Decano de Estudiantes del Conservatorio de Música y hacer voluntariado los martes en Casa Aboy.
