(Arecibo, PR) Ante la sorpresiva determinación anunciada hoy por el presidente de la Universidad de Puerto Rico (UPR), sobre mi remoción como rectora de la UPR en Arecibo, deseo expresar mi postura y aclarar varios aspectos importantes para la comunidad universitaria y el público en general. Entiendo que han sido muy desacertados y discriminatorios los comentarios del presidente de la Universidad de Puerto Rico, Dr. Luis A. Ferrao Delgado, y atentan en contra de la gobernanza de la UPRA y la imagen de la Institución ante un futuro incierto a causa del Proyecto Piloto de Servicios Compartidos. Recibo esta decisión con asombro, ya que en ningún momento se me brindo la oportunidad de sostener un diálogo profundo y franco para atender las alegaciones de tensiones en el recinto. Siempre he mantenido una disposición abierta al diálogo y al consenso, y con la debida oportunidad de expresar mi perspectiva.
Sin embargo, es evidente que ciertos sectores han optado por estrategias de desinformación y ataques personales que han obstaculizado los esfuerzos de construir un ambiente colaborativo y de paz. El presidente Ferrao utiliza alegaciones falsas realizadas en una carta anónima que circuló recientemente en donde se alegan actos de mala administración sin mencionar hechos concretos que respalden dichas aseveraciones. Las expresiones de la mencionada carta anónima también recogen comentarios ofensivos y personales hacia personal de mi confianza. Definitivamente, las acciones tomadas por Presidencia denotan discriminación por género en una situación muy machista ya que, en una sustitución similar en septiembre del año pasado, el presidente no hizo expresiones detalladas del porqué de su proceder destituyendo a otro rector habiendo circunstancias muy fuertes para esa destitución.
Si bien respeto la autoridad del Dr. Ferrao Delgado para tomar decisiones en beneficio de la institución, considero que este proceso pudo haberse manejado de manera más justa y equitativa, brindándome la oportunidad de atender las preocupaciones planteadas y demostrar mi capacidad para liderar con integridad, ética, responsabilidad social y compromiso.
Reitero mi agradecimiento a la comunidad universitaria que sí ha apoyado y creído en los proyectos transformadores que implementamos durante mi gestión. Continuaré trabajando, desde cualquier espacio, para defender los mejores intereses de nuestra Institución. Estas serán mis únicas declaraciones finales y firmes. Confío en que las decisiones que se tomen en el futuro sean para beneficio de nuestra Universidad de Puerto Rico y no para intereses particulares.