“Las expresiones del señor Robert Mujica, director ejecutivo de la Junta de Supervisión Fiscal, de que LUMA Energy se queda si o si, constituyen un atentado a la democracia y menosprecian el poder del pueblo de irse a las calles como en el verano de 2019. Los puertorriqueños quieren un servicio eléctrico estable, a un precio justo y LUMA Energy ha fallado miserablemente.
Un país con prosperidad económica incluye una sociedad con estabilidad emocional y paz. Estas expresiones de Mujica atentan contra esto. Exijo la renuncia inmediata de este señor que ha puesto en peligro la vida y seguridad de sus empleados y menosprecia e insulta a todo un pueblo”.