Las autoridades convencieron a un hombre que desistiera de entrar al mar en el área de Loíza, ante el aviso de fuerte oleaje para la zona norte de Puerto Rico.
“En Loíza tuvimos que orientar a una persona para sacarla del agua, porque no queremos a nadie en el agua. Hay un peligro potencial en estos dos días”, dijo el comisionado interino del Negociado Estatal de Manejo de Emergencias y Administración de Desastres, Nino Correa.
“Al principio la persona reaccionó manoteando, pero después cuando el compañero se le acercó, dio las gracias y siguió”, comentó Correa en cuanto a la reacción de la persona cuando se le pidió que saliera del agua.
Correa visitó junto al secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP), Alexis Torres varias playas el sábado para orientar a las personas que no entren al mar.
El secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP), Alexis Torres fue enfático que la intervención de la Policía es una informativa y de cordialidad, insistiendo en el mensaje de prevención para evitar el peligro ante el aviso del Servicio Nacional de Meteorología (SNM) donde alertaron que” se espera un oleaje que podría ir desde 10 hasta 12 pies en marejadas del norte generando olas rompientes de entre 15 a 20 pies a lo largo de la costa norte”.
“Por la información que el Servicio Nacional de Meteorología nos da, estos dos días son peligrosos. Si se fijan, tenemos sol, pero nuestras costas están en un peligro potencial grandísimo. No solo para las personas sino para nuestro equipo de trabajo.
El Servicio Nacional de Meteorología emitió para el fin de semana un aviso inundación costera, un aviso de altas marejadas, un riesgo alto de corrientes marinas y una advertencia para operadores de pequeñas embarcaciones para la zona norte de Puerto Rico.
NOTA: «Se espera un oleaje que podría ir desde 10 hasta 12 pies en marejadas del norte generando olas rompientes de entre 15 a 20 pies a lo largo de la costa norte, ocasionando condiciones potencialmente peligrosas para la seguridad y la vida. También nos han reportado que existe un alto riesgo de corrientes marinas en las costas de Puerto Rico e Islas Vírgenes, especialmente las playas del norte de la Isla. Solicito a la ciudadanía mucha prudencia y mesura, para no poner en riesgo la vida de nuestros rescatistas y primeros respondedores».