SAN JUAN- “Hablar del Amolao, es refrendar con humildad el compromiso de servicio al ciudadano, en un hombre que reunió en su carácter, la jovialidad para ganarse las simpatías de todo un pueblo que honró, y que hoy llora su partida”, consignó con pesar la representante Lourdes Ramos al conocer del deceso del exalcalde de Cataño, Edwin Rivera Sierra.
La legisladora enfatizó que Rivera Sierra superó la cotidiana frase de “hombre de pueblo”, para convertirse en un hermano, un hijo, un amigo en las buenas y en las malas.
“El Amolao nunca defraudó a su gente y extrapoló su sentido humorístico, casual y extrovertido a todos los rincones del país. Fue un trabajador incansable, un líder de masas y un hombre que nunca pidió halagos ni pleitesías. En fin, un buen puertorriqueño”, indicó Ramos.
La representante novoprogresista insistió que la pasión de Rivera Sierra era estar en contacto directo con la gente, sin intermediarios ni fanfarrias. “Era sencillamente, la viva encarnación de la sencillez de espíritu, con su generosidad y nobleza que dispensó a raudales”, expresó.
Ramos agregó que el mejor homenaje póstumo an Edwin Rivera Sierra es sin duda, ubicar por fin en el frente marítimo de Cataño, la estatua de Cristóbal Colón de Tsurab Tsereteli.
“Así le haremos justicia a su memoria”, terminó diciendo la representante Lourdes Ramos.
